Del corazón al papel

Un murmullo asola en cuanto cierro los ojos, y es lo que me hizo conocer un dolor distinto, quizá no mas fuerte pero nuevo, "otro" resuena y me sulfura el pensar en las cosas mismas que yo hacía, ay! duele el intentar no pensar, porque mientras mas lo intento mas me muevo a donde mismo ¿Cómo habrá sido?¿Qué tenía que yo no? Rodrigo, tu nombre es precioso y vale mucho, pero es como una moneda vieja, mucho valor emocional pero cero valor real. Si lograra dormir entre el vómito y la sangre quizá las cosas serian un tanto mas llevaderas, cuando tomé una vez mas ese instrumento tortuoso y lo clavé en mi brazo cosa de sentir un dolor aparte de la presión en el lado izquierdo del pecho y preocuparme de no dejar huella de lo que ha sucedido...
Al beber de esa copa un té templado al ambiente y oír música especial para la situación converso con mi corazón y le pregunto el por qué no es domable y me responde con el silencio abrumador... Saltando de pasión por hablar y oír sus palabras dirigidas a Rodrigo, primera persona detestada de verdad, quiero cambiar ese nombre... Juan, Benjamín, Isaac, Jacob, Israel, Jose, en ninguna parte de su historia sintieron algo similar, será que soy el primero en sentir esto...
Werther, mi amado y querido Werther, hombre sabio y hermoso, un romántico amante de los ángeles, que acaso no tuviste otra opción? por qué me muestras sólo esa solución para el sentir y por qué no existe un Alberto que me preste su pistola para concretar la salvación, Alberto... y si apareciera Alberto, yo me destruiría, yo caería en un vacío infinito, tal cuál cuando supe que ya hubo alguien y no soy el último, no soy el último, no soy el último, vuelvo a iniciar de nuevo y me doy vueltas en círculos que no tienen fin, porque no se rompe y aunque intente salir estoy delimitado por sus orillas tengo que ser mas fuerte, tengo que ser mas fuerte, pero Donde mas puedo entrenar mi fortaleza si este círculo maldito ya lo conozco entero y no puedo sacarle mas provecho. Ay Ay Ay!!!! es la exclamación plagiada del cómo expresar este dolor, y calmarlo con sangre y vómitos no son capaces de exterminarlo completamente, sino que lo sacan de mi cabeza por el sólo hecho de pensar "Rodrigo no tienen que saber" Ay! mi nombre de nuevo, es que ya no lo quiero mas, quiero llamarme Alcander, si, Alcander, o James, si, James, o Jacob, si Jacob, quizá sea mejor otro nombre como Cappie, Cappie, Cappie o Dios santo, si en ti no he confiado es porque tampoco mucho haz echo, no puedo esperar mas, me cuesta esperar mas, mañana será otro día pero el sentir quedará igual, con el nombre que me persigue y que aborrezco con mi corazón entero, cuál corazón, es mejor decir, con los trozos de corazón, con cada astilla de lo que queda, como como como, por qué todo es tan injusto, por qué si hice las cosas bien, ay ay ay!!! ángeles malditos, son culpables de que los hombres bebamos el elixir del condenado amor, cuando las cosas tienen su fin, cuando cuando cuando!, el sueño eterno es lo que no he probado, ese sueño en que no existe un futuro, ese sueño donde quedas estancado, pero nooo, estancado así con esto, si no existiera, si nunca hubiese existido, las cosas serían fáciles, ay de este cuerpo condenado al cual mutilo por placer, ay de las oraciones con fe, con alabanza, con desesperación, al ídolo en el cuál se refugia todo, ay de esto, ay de aquello, si incluso el brillo del verano ya no me excita sino que simplemente opaca las cadenas y oxida el dolor causando estragos en el estómago, quizá es ahí. Te invito a tocar esa melodía hermosa que acompañaba nuestros viajes, que me hacía volar por futuros lejanos y otros próximos, ay si sintieras, si sintieras, si sintieras...

El vómito, las heridas, las lágrimas, el dolor, un nombre, un hombre, son la desgracia, de un corazón que sufre por primera vez